Los preferidos del Instituto de Cultura de Manizales

Nueve de los diez contratos más altos están en manos de sociedades sin ánimo de lucro. Estudios previos no justifican contrataciones directas con ellos. Más dudas que certezas.

Por Mateo Yepes Serna

Tres fundaciones y una corporación se llevaron cerca de la tercera parte de la contratación destinada, desde el Instituto de Cultura y Turismo de Manizales (ICTM), a la producción de eventos entre enero y septiembre del 2018. El ICTM gastó $3.308 millones para esta función de los $5.694 millones que contrató en ese periodo. La constante fue la contratación directa con Entidades sin Ánimo de Lucro (ESAL).

Las más contratadas fueron las fundaciones Gamero e Impacto Recreación, con $283 millones; la Corpor ación Recreando, con $279 millones 996 mil, y la Fundación Guadalupe, con $226 millones 895 mil. Estas entidades ejecutaron programas que van desde la realización de marchas y fiestas hasta iniciativas culturales.

En nueve meses de este año, la representante legal de Recreando, Maribel Arias Naranjo firmó cinco contratos. Esta entidad fue la preferida del Instituto para la producción y logística de eventos. Sobre el proceso de contratación, Arias señaló que su empresa hace una propuesta para ejecutar el contrato. Otras veces la invitación llega desde el ICTM.

Desde hace 15 años, Recreando ejecuta contratos para producción y logística. Del total de los firmados este año, cuatro fueron contratos directos y uno por mínima cuantía. Ninguno fruto de una selección basada en méritos o capacidades empresariales. El de mayor valor fue por $160 millones para iniciativas culturales en Manizales como fiestas de aniversarios en barrios y la logística del Geek-Con, actividad que reúne a los aficionados al cómic, que se realizó en septiembre.

También se encargó de la organización de algunos eventos en la Feria de Manizales de este año. Para este propósito suscribió dos procesos en los meses de noviembre y diciembre de 2017 por valor de $775 millones. Sin embargo, este monto no entra en la suma de los nueve meses porque no se firmó en el 2018 (ver recuadro).

Los contratos de Recreando en 2018 (sin Feria de Manizales)

*1801014 - - - - - - - - - Asesoría al ICTM en todos los eventos de la ciudad - - - - - - - - $25.200.000

*1805092 - - - - - - - - - Apoyo celebración Día de la Madre en casas de cultura - - - - - - - $20.500.000

*1806107 - - - - - - - - - Actividades biblioparque - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - $4.296.326

*1807124 - - - - - - - - - Preparación actividades de la Semana Ambiental - - - - - - - - - - - $70.000.000

*1808178 - - - - - - - - - Apoyo a iniciativas culturales de la ciudad (cedido) - - - - - - - - $160.000.000

Los contratos de Recreando para la Feria de Manizales 2018

*1712586 - - - - - - - - - Apoyo en la logística de desfiles y reinado del café - - - - - - - - $630.567.417

*1711493 - - - - - - - - - Apoyo en el lanzamiento de la Feria en Bogotá - - - - - - - - - - - - $144.700.000

Nexos

Un nombramiento en la nómina del Instituto encendió las alarmas de Camilo Vallejo, gerente de la Corporación Cívica de Caldas. En su columna en LA PATRIA, titulada El gobierno de los olímpicos, escribió sobre la contratación de Julián Arias Naranjo como secretario general de la entidad. Es hermano de la representante legal de Recreando, Maribel Arias Naranjo, la mayor contratista del ICTM hasta el 30 de octubre.

El nuevo integrante del Instituto argumentó que eso pasa en todas partes del país. "Estaríamos vulnerando la ley si Maribel fuera todavía contratista. Ella cedió su contrato antes de mi posesión", aclaró. La cesión del contrato 1808178 de Recreando se efectuó el 30 de octubre, dos días antes de la posesión del secretario. Hoy quedan pendientes por ejecutar $30 millones, de los $160 millones del monto total.

Ahora el contratista es Gustavo Andrés Sánchez, representante legal de la empresa Imagina Eventos, otra favorita del ICTM. Desde enero hasta septiembre, esta firma celebró cinco contratos, incluido uno en la Feria, que sumaron $140 millones. A esos hay que agregarles los $30 millones que están pendientes de la cesión del contrato.

El secretario general del Instituto, Arias Naranjo, aseguró que Recreando no volverá a celebrar contratos con el Instituto ni siquiera en la Feria de Manizales 2019. LA PATRIA constató que esta corporación tiene también convenios con la Administración municipal, pues hoy realiza actividades recreativas y deportivas dentro del programa 'Pégate al parche', por $47 millones 500 mil. Ese convenio se firmó con la Secretaría de Gobierno el 18 de mayo y tiene plazo hasta el 15 de diciembre para ejecutarse.

Además, hasta el 4 de noviembre se encargó de la ciclovía por la Avenida Santander, mediante un convenio con la secretaría del Deporte por $280 millones 978 mil 200.

Sí hay empresas

Una base de datos de la Cámara de Comercio de Manizales registró 172 empresas inscritas para desarrollar eventos de toda índole. De esas, 29 cumplen los requisitos para contratar con el ICTM, pero según el Secop, no tienen convenios celebrados. Algunos representantes de las empresas afirmaron haber trabajado con el ICTM por licitación, lo que no concuerda con los datos publicados en la plataforma.

Una práctica común en la contratación para cultura son los convenios de palabra hechos por los contratistas del ICTM, para gestionar eventos culturales. El contratista Gustavo Andrés Sánchez afirmó que esos contratos por prestación de servicios, no siempre tienen que ser escritos y tampoco están obligados a pagar prestaciones sociales. Muchas empresas no son contratadas desde el Instituto, sino subcontratadas por intermediarios, muchas veces Entidades sin Ánimo de Lucro.

ESAL privilegiadas

Según Héctor Fernando Ortiz, gerente del ICTM, la razón para firmar convenios con organizaciones sin ánimo de lucro es la vocación social que estas tienen. "Los recursos que ganan las entidades sin ánimo de lucro se redistribuyen entre sus asociados o se reinvierten en programas sociales", insistió Ortiz.

En la investigación conjunta entre la Corporación Cívica de Caldas y LA PATRIA, se identificaron 37 contratos para eventos y programas. 28 fueron convenios con sociedades sin ánimo de lucro, seis con personas naturales y solo tres con empresas. Se destinaron $3 mil 308 millones, de los cuales $2 mil 158 millones fueron para entidades sin ánimo de lucro, es decir, el 65% del gasto.

Según algunos profesionales en contratación pública, el decreto 092 del 2017 que reglamenta la contratación con este tipo de entidades, solucionó problemas del decreto anterior, el 777 de 1992, que daba pie a contrataciones irregulares. Por eso, para contrarrestar los defectos de esta norma se establecieron tres requisitos para contratar con las ESAL:

Que el objeto del contrato esté previsto en el Plan de Desarrollo y se relacione con la promoción de los derechos de los menos favorecidos, o con la ejecución de manifestaciones artísticas, culturales o deportivas. Que ninguna de las partes tenga beneficios con la firma del contrato. Y que no haya oferta que ofrezca lo mismo en el mercado.

Más allá de estas obligaciones, el contratante debe demostrar idoneidad del contratista, su experiencia y la razón para hacerlo de forma directa. La documentación se debe incluir en el estudio previo al contrato, porque ahí yace la justificación, su modalidad, el monto y por qué se elige a determinado contratista.

No obstante, al revisar los 10 contratos más altos del ICTM hasta septiembre (ver recuadro), nueve son con ESAL. De estos, solo los convenios con la Corporación Grita (Manizales Grita Rock) y con el Festival Internacional de Teatro justifican la contratación directa que permite el Decreto 092 del 2017, pues son las únicas que pueden desarrollar el objeto del contrato. En los demás no aparece justificación, ni análisis de mercado.

Javier Rincón, abogado y profesor de la Universidad Javeriana, anotó que esos soportes son esenciales. "Si no existen esos análisis, ¿cómo le garantiza usted a la comunidad que contrata lo mejor en términos de calidad?". Según el profesor, los estudios previos deben demostrar que se cotizó con varias organizaciones y que la elegida fue la mejor opción. "Deben garantizar el principio de planeación, pues si no se aplica se corre el riesgo de que aumenten los contratos a dedo".

El gerente de la CCC alertó sobre la cantidad de contratos por modalidad directa para la prestación o compra de servicios, que muchas veces no se refieren a eventos y que además desmitifican la idea de que los contratos directos van, en su mayoría, destinados a la realización de presentaciones artísticas y culturales.

La seguridad

Cooviser es la empresa encargada de la vigilancia para las instalaciones a cargo del ICTM. Firmó hasta septiembre 12 contratos por $381 millones 249 mil. Camilo Vallejo aseveró que se debe tener cuidado con las vigencias de los contratos. “Están haciendo una contratación fragmentada, con plazos cortos, que no permite que haya selecciones más transparentes, más completas”.

Los contratos con estas empresas se realizan en poco tiempo, generalmente van de 23 días a cinco meses. Se ejecutan por lugar, es decir, un contrato específico para seguridad en el Bosque Popular, otro para la seguridad de Expoferias, y así sucesivamente con los demás espacios administrados por el Instituto.

El gerente del ICTM aseguró que los plazos con esta empresa son cortos pues no cuentan con el presupuesto para licitar. "Si yo pudiera tener el recurso de todas las secretarías en enero, convocaría con licitación para hacer todo el proceso y lograr seguridad en todos los lugares y eventos", explicó. El Instituto se financia por medio de contratos interadministrativos con las secretarías de Desarrollo Social y TIC y Competitividad, de la Alcaldía de Manizales.

Desde el Instituto

Héctor Fernando Ortiz enfatizó en que la mayoría de las ESAL comparten el mismo objeto que el ICTM, la promoción de actividades culturales, y que por eso se privilegian los contratos con estas entidades. "No es común encontrar empresas privadas con razones sociales, como la realización de eventos culturales, como sí las tienen las ESAL", concluyó.

A su vez, el nuevo secretario del Instituto, Julián Arias Naranjo, afirmó que el Decreto 092 del 2017 cobija a la entidad por su misma naturaleza, pues la mayoría de los contratos están enfocados en realizar presentaciones artísticas y culturales.

Con respecto al último informe de la Contraloría Municipal, en el que hallaron 26 irregularidades, Arias Naranjo explicó: "Una medida fue mejorar el comité de contratación, que evalúa cada necesidad del Instituto y define cuál modalidad de selección podría funcionar".

LA PATRIA y la CCC evaluaron los contratos del ICTM con las siguientes categorías:

Evento: Contratación de personas naturales o jurídicas para el montaje, producción y realización de eventos.

Prestación de servicios: Contratación de personas naturales para apoyo a la gestión en diferentes áreas.

Compra de servicios: Contratación con personas jurídicas para la prestación de servicios.

Obra: Contratación de obras públicas.

Arriendo: Contratos entre el Instituto y terceros para el arriendo de espacios.

Compraventa / Suministro: Compra de bienes materiales o inmateriales para el funcionamiento de la entidad.

Mayores incrementos

Dos destinaciones presupuestales (rubros) aumentaron considerablemente en dos años:

1. Los gastos de operación: la realización de eventos en la ciudad se incrementaron 120% con respecto al 2016, para cuando el Concejo de Manizales aprobó $2 mil 355 millones. En el 2018, el rubro que se aprobó fue de $5 mil 200 millones.

2. Los proyectos de inversión: el apoyo a iniciativas culturales aumentó un 33,6% desde el 2016. Pasó de $5 mil 263 millones 600 mil a $7 mil 33 millones 324 mil.

Interactúe con nuestro buscador de los contratos suscritos por el ICTM en el 2018.