Falso Falso Falso Falso Falso Falso Falso Falso
Falso
A raíz del descontento ocasionado por la reforma tributaria radicada el 15 de abril por el Gobierno Nacional en el Congreso, han empezado a circular varias publicaciones en Facebook y Twitter en las que se comenta que Colombia es el “único país en el mundo en proponer reformas tributarias en medio del hambre y la muerte” o el “único país del mundo que hace una reforma tributaria en plena pandemia”.
Este tipo de imágenes han sido compartidas más de mil veces, principalmente en departamentos como Atlántico, Santander y Caldas, según la herramienta de monitoreo de redes sociales CrowdTangle. Pero su contenido es falso. En varios países (algunos en 2020 y otros en 2021) se han propuesto reformas tributarias y otros preparan transformaciones del mismo tipo; más allá de la discusión de en qué se enfocan unas u otras.
De acuerdo con la Enciclopedia del Banco de la República, una reforma tributaria es una modificación de la estructura de los impuestos de un país, “la cual determina quién o quiénes deben o no pagar esa esta tributación, así como el motivo de ello, la cantidad que deben abonar, etc”. Los cambios se hacen con el objetivo de aumentar o disminuir la cantidad de ingresos que recibe el Estado por concepto de impuestos.
Como le dijo a Colombiacheck Diego Cortés, economista y magíster en economía de la Universidad Nacional de Colombia, “en varios países se están discutiendo reformas fiscales por los afanes de cerrar el déficit fiscal, principalmente. Para el caso de Colombia, hay unos compromisos con el FMI [Fondo Monetario Internacional] para reducir el déficit en estos años. Hay razones de presiones por calificadoras de riesgo y por entidades como el FMI sobre los países. Es por ese susto del nivel óptimo o no peligroso de deuda pública”.
Así mismo, varios expertos en impuestos, consultados por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, ya esperaban en enero de 2021 reformas fiscales para este año en varios países debido a que los “gobiernos y organismos internacionales buscan cubrir déficits masivos” incrementados por la pandemia de COVID-19.
Por ejemplo, países como México y España se preparan para presentar reformas tributarias. Y en los casos de Costa Rica, Estados Unidos, igual que en Colombia, ya se presentaron propuestas para incrementar el recaudo de impuestos que deben ser sometidas a la aprobación legislativa.
A mediados de marzo, se anunció que la Cámara de Diputados de México aprobó la creación del Grupo de Trabajo para la Transición Hacendaria, un equipo con miembros de todos los partidos de la Cámara, que tiene como objetivo preparar una reforma fiscal que será discutida después de las elecciones federales del 6 de junio de 2021.
La reforma estará enfocada en gravar las fortunas de los multimillonarios y reducir la carga tributaria de las clases baja y media, según le dijo al medio local Expansión Alfonso Ramírez Cuellar, diputado del partido Morena y quien lidera la misión.
En España, por su parte, el Ministerio de Hacienda convocó el lunes 12 de abril un comité de 17 expertos para que trabajen durante todo el año y presenten una reforma tributaria antes del 28 de febrero de 2022. Sin embargo, el gobierno quiere ir incorporando las primeras conclusiones de este comité antes de esa fecha para incluirlas en el presupuesto general de 2022, que debería empezar a tramitarse aproximadamente en octubre de este año.
El objetivo de la reforma es equiparar el recaudo de ese país al de la zona euro, que es, en promedio, 7 % superior al español. Se esperan incrementos en los impuestos de las empresas, el patrimonio, las sucesiones y las donaciones.
Así mismo, según reportó el diario estadounidense The New York Times, el pasado 7 de abril, “el Departamento del Tesoro dio a conocer los detalles del plan fiscal de Biden, que apunta a recaudar hasta 2,5 billones de dólares en 15 años” para ayudar a financiar la propuesta de infraestructura del gobierno.
La reforma fiscal, llamada The Made in America Tax Plan, incluye, por ejemplo, elevar la tasa del impuesto sobre la renta de las empresas, que hoy es del 21 por ciento, al 28 por ciento, “reducir los incentivos para que las jurisdicciones extranjeras mantengan tasas impositivas corporativas ultrabajas fomentando la adopción mundial de impuestos mínimos”, “reemplazar los subsidios a los combustibles fósiles por incentivos para la producción de energía limpia” e “intensificar la aplicación de la ley para abordar la elusión de impuestos corporativos”.
Para la implementación de la mayoría de las propuestas de la reforma, según un artículo de análisis de la firma de abogados Holland & Knigh, Biden necesita de la aprobación del Congreso, que no resultará fácil por la oposición de los republicanos y “las opiniones dispares de los miembros demócratas de los estados conservadores”.
Y finalmente, en octubre de 2020 el gobierno de Costa Rica presentó una propuesta fiscal que incluía subir impuestos, reducir el gasto y vender activos del Estado para negociar un préstamo de 1.750 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional. El objetivo: reducir el déficit fiscal, que según El País (España), se incrementó con la pandemia, pero venía creciendo desde hace años porque ese país “ya venía financiando su gasto corriente con deuda desde 2009” y la reforma fiscal de 2019 no fue suficiente para solucionar el problema.
La propuesta del gobierno, según reportaron varios medios internacionales, ocasionó fuertes protestas y el bloqueo de 33 carreteras estratégicas en el país. Entonces el gobierno la retiró y no llegó a ser discutida ni en el Congreso ni con el FMI.
Pero luego se generó otra propuesta, que aceptó el fondo para otorgar el préstamo y que implican un ajuste fiscal cercano al 5 % del Producto Interno Bruto del País. Ahora se tramitan en el Congreso varios proyectos de ley, por ejemplo, sobre nuevos impuestos a las casas de lujo y a los premios de lotería; para el recorte de salarios de los empleados públicos y para que 14 empresas estatales destinen hasta el 30 % de sus utilidades al pago de deuda pública.
De este modo, calificamos como falsas las publicaciones en las que se señala que Colombia es el único país en el mundo en promover reformas tributarias en medio de la pandemia. En Estados Unidos y Costa Rica, por ejemplo, los gobiernos ya presentaron propuestas para incrementar el recaudo de impuestos y en otros países se preparan las discusiones sobre el tema.