Un vez más circula en redes sociales una desinformación (1, 2, 3, 4) en la que aseguran que el grupo guerrillero en el que militó Gustavo Petro, el M-19, fue el autor del secuestro y asesinato de Gloria Lara, una funcionaria del Ministerio de Gobierno, el 23 de junio de 1982.

Esto es falso. Aunque se trata de un crimen que en la actualidad sigue en la impunidad, las pruebas sobre este hecho delictivo recayeron sobre el grupo delincuencial conocido entonces como ‘Los Murcia’, liderado por un exjuez que también estuvo vinculado a otro secuestro.

En esta ocasión, la desinformación volvió a surgir tras una publicación del usuario de Twitter @Sernaalfonso2, quien posteó: “Esta imagen me dejó marcado, yo la recuerdo y siento ira, M19 LA VIOLARON, LA EMBARAZARON DIZQUE PARA HACERLE UN HIJO DEL PUEBLO,Y LUEGO LA ASESINARON” (sic).

El tuit, publicado el 16 de enero de 2013, incluye una imagen con texto que dice: “Gloria Lara secuestrada, violada, torturada y, finalmente, asesinada vilmente por el M-19 de Gustavo Petro y Antonio Navarro. Fue hallada muerta en estado de embarazo causado por sus captores del M-19”.

Dentro de la imagen también se muestran dos fotografías: una de Lara Perdomo y otra de la portada del diario El Bogotano del 12 de julio de 1982, donde se muestra un sujeto encapuchado con una ametralladora junto a ella.

En otra de las publicaciones en Twitter sobre este tema, un tuitero afirma: “Claro,recuerde el triste caso de Gloria Lara secuestrada en 1982 por el M 19 y cuyos carceleros la violaron,la embarazaron y asesinaron” (sic), mientras que otro respondió a una publicación sobre Gustavo Petro y tuiteó:  “Ese quien es? A verdad es del M19 grupo narco terrorista que quemó y asesino magistrados en el palacio de justicia. Secuestro violó y asesino a Gloria Lara y se tomó la embajada de republica Dominicana. Como no olvidar. Y le dicen el kks.... Algo más parecido a la realidad ?” (sic).

A propósito de la participación de Gustavo Petro como candidato a la presidencia de Colombia desde el año 2018, esta misma desinformación comenzó a circular con mayor fuerza en Facebook (1, 2, 3, 4) y Twitter (1, 2, 3), y fue verificada en mayo del 2022 por Colombiacheck junto a nuestros colegas de Rutas del Conflicto, a raíz de la viralización de algunas de estas publicaciones.

Gloria Lara: su secuestro y asesinato

Como explicamos detalladamente en ese chequeo, la abogada dedicó parte de su vida a la defensa de los derechos de las comunidades indígenas y a la participación política de los movimientos campesinos de ese entonces, como lo menciona un artículo del archivo digitalizado de la revista Semana que se titula “Gloria Lara, ¿por qué?”.

Al momento de su secuestro, se desempeñaba como directora nacional de Integración y Desarrollo de la Comunidad en el Ministerio de Gobierno. Además, era integrante de una poderosa familia del Huila: su papá, Oliverio, era un reconocido empresario y su esposo, Héctor Echeverri, fue presidente del Senado de 1979 a 1980.

El 23 de junio de 1982 a las 8:00 de la noche, Lara fue secuestrada en el barrio Teusaquillo de Bogotá, cerca de su lugar de residencia junto con su chofer, quien posteriormente, fue dejado en libertad.

El periódico El Bogotano recibió el 12 de julio de 1982 la primera prueba de supervivencia de Lara, con una foto de ella en la que aparecía acompañada de un sujeto encapuchado con una ametralladora. Es la misma imagen usada en la desinformación.

Esta es la portada del diario El Bogotano del 12 de julio de 1982 cuando los captores enviaron las primeras pruebas de vida.

El Bogotano también recibió una carta en la que los secuestradores aclararon que no pertenecían a ningún movimiento subversivo y que no intentaban suplantar al M-19. Se vieron en la necesidad de realizar esta aclaración porque, una semana después del secuestro, las cadenas radiales Caracol y Todelar afirmaron haber recibido llamadas telefónicas en las que se culpaba al M-19 de ser el autor. 

La siguiente prueba la recibió el mismo medio el 28 de octubre y también fue una fotografía acompañada nuevamente de un encapuchado. En ella se amenazaba con matar a Lara al día siguiente, al no poder entablar un diálogo con su familia. El 28 de noviembre de 1982, la funcionaria fue asesinada a las 11 de la noche de un disparo a quemarropa en el cráneo junto a una bandera roja de la Organización Revolucionaria del Pueblo (ORP).

Un mes después del asesinato, el ministro de Defensa, general del Ejército Fernando Landazábal, y el director de la Brigada de Institutos Militares, BIM, general Hernando Díaz Sanmiguel, anunciaron en los medios de comunicación haber capturado a los 20 implicados en el crimen. Sin embargo, la ORP fue desvinculada del caso un año después.

Fragmentos de la noticia publicada por El Tiempo el 28 de diciembre de 1982, en la que el Ejército revela las grabaciones con las confesiones de los presuntos responsables del secuestro y muerte de Gloria Lara.

La vinculación de ‘Los Murcia’ como responsables del crimen de Gloria Lara

En agosto de 1983, el juez 16 superior de Bogotá, Jorge Enrique Alford Córdoba, desestimó las capturas de los presuntos responsables de la ORP e involucró al caso a la banda delincuencial del exjuez Iván Darío Murcia y a dos personas más.

El reportaje de Semana “Caso Gloria Lara”, publicado en agosto de 1985, revela que Murcia y su banda fueron los mismos secuestradores del entonces funcionario de Texaco Kenneth Stanley Bishop, en marzo de 1983, quien tras su liberación afirmó que “durante su cautiverio, los secuestradores lo amenazaban con hacerle lo mismo que a Gloria Lara si no pagaban el rescate”. 

Además, las investigaciones apuntaban a que las máquinas de escribir y las cámaras utilizadas para las pruebas de supervivencia en ambos casos eran las mismas.

En medio de la investigación, el 9 de julio de 1984, Murcia huyó de la cárcel Modelo con la complicidad de sus guardias, quienes posteriormente fueron condenados. Después de este suceso, no se volvió a rastrear ni el paradero ni la situación judicial del exjuez.

El 12 de febrero de 1992, como asegura El Tiempo en “Gloria Lara: un crimen sin castigo”, uno de los juzgados de conocimiento adscrito a la desaparecida Dirección Seccional de Orden Público de Bogotá absolvió de los cargos a los miembros de la ORP que habían sido vinculados con este caso. 

En 1998, la Corte Suprema de Justicia tuvo que ordenar “la cesación del procedimiento penal o prescripción, por el hecho de haber transcurrido más de 10 años” sin que se lograra un fallo. En 2009, el entonces procurador, Alejandro Ordóñez, pidió la reapertura del caso al calificarlo como un crimen de lesa humanidad. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia, de nuevo, negó la petición en 2012 y el crimen se mantuvo en la impunidad.

Por su parte, Petro ha negado en varias ocasiones su participación en el crimen de Gloria Lara, como en este trino del 29 de enero del 2018, donde el entonces senador y candidato presidencial  le respondió a un tuitero que había retuiteado un mensaje en el que lo acusaron del crimen. “Ivan usted esta reproduciendo esta información que es una calumnia. Jamás ni la prensa del entonces ni la investigación judicial relacionaron el secuestro y asesinato de Gloria Lara con el M19. Se trata hoy de una campaña delictiva” (sic) escribió el entonces precandidato presidencial.

O este otro, del  28 de febrero del 2018, donde se volvió a referir al tema, de nuevo en respuesta a un trino que lo acusaba, lo mismo que al M-19.

En conclusión, nuevamente calificamos esta desinformación como falsa, ya que no hay pruebas que evidencien la participación de Gustavo Petro o el M-19 en el asesinato de Gloria Lara de Echeverri, pues las autoridades nunca vincularon a dicha organización guerrillera con el caso y las pruebas apuntaron a la banda de Los Murcia.