Desde que apareció el primer reporte oficial de un caso de infección de la viruela símica o viruela del mono el 6 de mayo de 2022 en el Reino Unido, la incertidumbre alrededor del mundo sobre esa enfermedad no se hizo esperar.
Tanto medios de comunicación, como usuarios en redes sociales (1, 2) se han encargado de poner al virus y al seguimiento de su evolución en la agenda pública, especialmente en Colombia, en donde las autoridades, hasta el 31 de mayo de 2022, no han confirmado la presencia de este tipo de viruela.
Según cifras registradas por el portal de ciencia y datos Our World In Data, del 6 al 27 de mayo de 2022 se han confirmado 401 casos de viruela del mono en todo el mundo, principalmente en Reino Unido, con 106 casos, España (106), Portugal (74), Canadá (26) y Alemania (21).
Aunque hay países con menos casos como Francia, Estados Unidos, Bélgica, Suiza y Australia, todavía no hay registro de que esta enfermedad haya llegado a Colombia.
¿Qué es la viruela del mono y de dónde surge?
De acuerdo con el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), la viruela del mono es una enfermedad rara causada por la infección con el virus de la viruela del simio, que pertenece al género Orthopoxvirus en la familia Poxviridae. El género Orthopoxvirus también incluye el virus variola (que causa la viruela), el virus vaccinia (utilizado en la vacuna contra la viruela) y el virus de la viruela bovina.
La viruela del mono es una zoonosis viral, es decir, una enfermedad provocada por un virus que es transmitido de los animales a las personas, y como explica la Organización Mundial de la Salud (OMS), produce síntomas parecidos a los que se observaban en los pacientes de viruela en el pasado, aunque menos graves.
“Con la erradicación de la viruela en 1980 y el posterior cese de la vacunación contra la viruela, se ha convertido en el ortopoxvirus más importante. La viruela símica sigue apareciendo esporádicamente en algunas partes centrales y occidentales de la selva tropical de África”, señala la OMS.
La viruela símica es endémica de la República Democrática del Congo, en África, en donde en 1970 se detectó por primera vez en un niño de nueve años, siendo este el primer reporte en humanos. En esa región se había erradicado la viruela desde 1968, así que desde entonces la mayoría de los casos notificados proceden de regiones rurales de la selva tropical de la cuenca del Congo y el África occidental.
Se han registrado casos esporádicos de viruela símica en otros países de África Occidental y Central. Desde 1970, se han notificado casos humanos de viruela del mono en 10 países africanos, como Camerún, Côte d’Ivoire, Gabón, Liberia, República Centroafricana, República del Congo, República Democrática del Congo, Sierra Leona, Sudán del Sur y Nigeria.
Este último país sufrió en 2017 el mayor brote documentado, aproximadamente 40 años después de los últimos casos confirmados, con más de 500 casos sospechosos, más de 200 confirmados y una tasa de letalidad de aproximadamente el 3%.
¿Cómo se transmite la viruela del mono?
La infección inicial o primaria por el virus se produce por el contacto directo con la sangre, los líquidos corporales, las lesiones de la piel o las mucosas de animales infectados, mientras que una transmisión secundaria se puede producir por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas de una persona ya infectada y por el contacto con objetos contaminados o fluidos de un pacientes diagnosticados con la viruela del mono.
En Colombiacheck, consultamos al médico epidemiólogo Fernando Pío de la Hoz Restrepo, doctor en Epidemiología y Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Londres y exdirector general del Instituto Nacional de Salud (INS), quien advirtió que, aunque la transmisión se produce principalmente por gotículas respiratorias que salen, generalmente, tras un contacto cara a cara de forma prolongada con una persona ya infectada, el poder epidemiológico de la viruela es considerado bajo a moderado.
“El riesgo de tener una epidemia o brote por viruela del mono es real, sin embargo, el potencial epidémico es menor, por ejemplo, que el covid-19 o la influenza, porque la transmisión es menos eficiente. Aunque la viruela del mono se transmite por gotas respiratorias la distancia que estas recorren es más corta que la de otros virus y no viajan más de unos centímetros o un metro. Eso quiere decir que, para uno contagiarse con viruela del mono necesita estar en contacto cercano y durante más tiempo con alguien infectado”, afirma el epidemiólogo.
¿Cuáles son los síntomas comunes de la viruela del mono?
El periodo de incubación (intervalo entre la infección y la aparición de los síntomas) de la viruela símica suele ser de 6 a 16 días, aunque puede variar entre 5 y 21 días.
Durante los primeros 5 días luego de la infección pueden aparecer síntomas como fiebre, dolor de cabeza intenso, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor lumbar, dolores musculares (mialgias) y falta de energía (astenia intensa). Sin embargo, durante el periodo de erupción cutánea (que ocurre entre 1 y 3 días después del inicio de la fiebre), es cuando aparecen otros síntomas externos, como ampollas llenas de líquido (vesículas), llagas pequeñas llenas de pus (pústulas) y costras, que generalmente afectan primero el rostro y se expanden al resto del cuerpo.
Con la viruela del mono, las zonas más afectadas son el rostro, las palmas de las manos y las plantas de los pies, y la eliminación completa de las costras puede tardar hasta tres semanas.
Según el doctor De la Hoz, al tratarse de una enfermedad altamente sintomática, esto hace que también se limite la posibilidad de transmisión en la población y que el potencial epidémico baje.
“En esta enfermedad los síntomas son muy marcados, por lo cual las personas que se infectan se sienten enfermas y por sí mismas limitan el contacto social. Esto hace que el control para este tipo de enfermedades sea más real o más factible que para otro tipo de enfermedades infecciosas como el covid-19, donde hay muchos casos asintomáticos que permiten una transmisión del virus de forma más rápida, mientras que en la viruela del mono es más fácil hacer los cercos epidemiológicos necesarios y pedirle a las personas que hagan aislamiento”, refiere el doctor de la Hoz.
¿Existe tratamiento o vacuna para la viruela del mono?
En la actualidad no existe un tratamiento comprobado y seguro para la infección por el virus de la viruela del mono, aunque sí hay fármacos que son útiles durante el desarrollo de la enfermedad, como los antivirales que tienen actividad contra la viruela del mono in vitro y en modelos experimentales. Sin embargo, ninguno de estos medicamentos ha sido estudiado ni usado en áreas endémicas para el tratamiento de esta viruela.
Otra de las opciones, aunque menos accesible, es el uso de vacunas contra la viruela humana, debido a que, según explica el CDC, al haber una relación entre la viruela del mono con el virus que causa la viruela, su vacuna puede proteger a las personas contra la viruela del simio en un 85% cuando se administran antes de la exposición a la viruela.
“La mayoría de las personas que reciben la vacuna contra la viruela o la viruela símica solo tienen reacciones menores, como fiebre leve, cansancio, glándulas inflamadas y enrojecimiento y picazón en el lugar donde se aplica la vacuna”, señala el CDC.
Sin embargo, según la OMS, en la actualidad, las vacunas originales (de primera generación) contra la viruela ya no están disponibles para el público en general, y aunque en 2019 la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó una vacuna para la prevención de la viruela símica, su disponibilidad sigue siendo limitada.
Estados Unidos es uno de los pocos países con acceso a esta vacuna conocida como Jynneos, administrada en dos dosis con cuatro semanas de diferencia, y que está autorizada para prevenir la viruela y la viruela del mono en adultos.
¿Cuál es la población de mayor riesgo?
Sobre la evolución de la viruela del mono, el epidemiólogo Fernando de la Hoz explica que, aunque la mayoría de las personas tienen una enfermedad relativamente moderada que cede espontáneamente después de dos o tres semanas, hay algunas personas que pueden complicarse, como aquellas que tienen enfermedades crónicas, inmunodeficiencia o que están en tratamientos para diferentes tipos de cáncer.
Estas personas, como aquellas que se infectan por dosis altas del virus por tener un contacto muy cercano con personas infectadas pueden presentar una enfermedad severa.
“Hay que tener en cuenta que las personas que fueron vacunadas contra la viruela humana están protegidas en un alto porcentaje con esta viruela del mono. Probablemente los mayores de 55 años en países como Colombia tendrían un grado de protección contra la enfermedad severa de esta viruela, mientras que los jóvenes serían los más expuestos”, señala Fernando de la Hoz.
Al respecto, el doctor Ángel Hernández Merino, miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP) explicó al medio El Periódico de España, que el 70% de la población mundial no está vacunada frente a la viruela, y que las personas con mayor riesgo serían niños, embarazadas o pacientes con inmunosupresión, con quienes se debe tener mayor precaución.
“No es fácil que los niños u otras personas puedan contagiarse, pero puede ocurrir. En este caso, aún tratándose de una enfermedad leve, y siempre en ese colectivo de más riesgo, la dolencia puede ser más grave”, advierte el especialista.
Viruela del mono en Colombia: sin casos confirmados
Durante el inicio de esta semana, al país llegó el rumor de un posible caso de viruela del mono que habría llegado por primera vez a Colombia. Según el Instituto Nacional de Salud (INS), se trataba de un ciudadano extranjero, residente en España, que había estado en Colombia, posiblemente con el virus en periodo de incubación y totalmente asintomático.
Tras su regreso a su país de residencia, el INS rastreó y contactó a las personas que habrían tenido relación con el extranjero para evitar una posible propagación de la infección.
Sin embargo, el ente institucional descartó el caso, tras evaluar la fecha de contagio, el periodo de incubación y el desarrollo del cuadro clínico, tal como lo reportaron medios nacionales (1, 2, 3). El INS llegó a la conclusión de que este ciudadano extranjero no estaba infectado durante su paso por Colombia.
Por su parte, Claudia Cuéllar, directora de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud y Protección Social, indicó en un boletín de prensa del 20 de mayo de 2022, que se tras realizarse una evaluación del riesgo, se concluyó que el nivel del riesgo para el país es moderado, por lo que se requieren medidas de seguimiento y control, atendiendo las recomendaciones de la OMS.
"Esta evaluación se realizará de nuevo conforme cambie la evidencia científica o se tengan más reportes e información relacionada con el comportamiento de este virus", agrega Cuellar.
La funcionaria también detalló que, entre las recomendaciones de la OMS, los países deben hacer evaluación del riesgo, ya que la identificación de una serie de casos confirmados y presuntos de viruela símica sin vínculos de viaje directos a un área endémica es muy inusual.