En Facebook han compartido en los últimos días publicaciones (1, 2, 3) que afirman que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ganó la reelección en la segunda vuelta de los comicios en ese país que ocurrieron el 30 de octubre de 2022.

“Auditoría CONFIRMA que Bolsonaro GANÓ la segunda vuelta en Brasil. ¡Se destapó el fraude! El partido de Bolsonaro (PL) solicitó que se anulen los votos emitidos en cientos de miles de urnas durante el ballotage (segunda vuelta)” (sic), dicen varias publicaciones de la red social que alegan un supuesto fraude electoral (1, 2, 3).

En algunos de los post que han publicado páginas como Centro Democrático Nariño, se puede ver un enlace al portal Costa Noticias con el titular ‘Auditoría a las urnas electrónicas, establece que el presidente Jair Bolsonaro ganó la presidencia de Brasil’. Este conduce a una nota en la que se cuenta, supuestamente, cómo una auditoría estableció que Bolsonaro ganó los comicios:

“Continúa la incertidumbre en Brasil a raíz de un presunto fraude electoral que se habría presentado en las elecciones presidenciales (...). La información fue dada a conocer en una conferencia de prensa, en el que el presidente del Partido Liberal, Valdemar Costa Neto publicó el informe encargada por el PL luego de contratar una auditoría a las urnas electrónicas, en el que establece la auditoría publicada esta tarde en Brasil, establece que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ganó la 2a ronda electoral

Revela injerencia externa en 472.000 urnas electrónicas en la segunda vuelta. El Partido Liberal de Bolsonaro va a pedir la anulación de las elecciones.

En este momento había técnicos presentes que descubrieron los datos del partido y legales. En resumen, el documento que se entregará al Tribunal Superior Electoral TSE muestra irregularidades y la PL pedirá medidas para anular partes de los votos, ya que el presidente Jair Bolsonaro habría recibido el 51.05% de los votos en la disputa con el comunista Luis Inazio Lula da Silva”

La nota no ofrece pruebas de una nulidad de la elección y tergiversa una noticia del pasado 22 de noviembre, cuando Bolsonaro pidió la anulación parcial de las elecciones ante el Tribunal Superior Electoral de Brasil (TSE). El presidente y su partido reclamaron por medio de un documento que se invaliden una parte de los votos, argumentando que existen “indicios de errores graves” y “mal funcionamiento” en las urnas. Aunque perdió la elección, la derecha consiguió la mayoría en el Legislativo con el mismo sistema de votación.

El pedido de anulación fue presentado por la coalición ‘Pelo Bem Do Brasil’ (Por el Bien de Brasil, en español), conformada por el Partido Liberal, los Republicanos y los Progresistas, como se puede ver en el documento que revelaron los colegas de Aos Fatos.

El presidente del tribunal, Alexandre de Moraes, dictaminó que los demandantes debían presentar una auditoría de las dos jornadas electorales de octubre en un plazo de 24 horas, o de lo contrario rechazaría su pedido.

Valdemar Costa Neto, presidente del Partido Liberal (PL), en donde milita Bolsonaro, dijo que 277.000 urnas que fueron construidas antes del 2020 no sirven por falta de verificación y las nuevas le dan la victoria al actual mandatario. Pero todas han sido auditadas por organismos nacionales e internacionales, como indican informes del mismo Tribunal Electoral y la Organización de los Estados Americanos (OEA).

El PL se negó a presentar una auditoría para la primera vuelta electoral, en la que salieron fortalecidos, e insistió en atacar, sin pruebas, el resultado de la segunda vuelta de elecciones.

En la noche del miércoles 23 de noviembre, el presidente del TSE negó la solicitud de Bolsonaro y su coalición de anular la elección del 30 de octubre y les aplicó una multa de 22,9 millones de reales brasileños (4,6 millones de dólares). “El ministro entendió que el demandante, además de incumplir la orden judicial, debe ser condenado por litigar de mala fe, ya que no presentó ‘pruebas y circunstancias que justifiquen el establecimiento de una verificación extraordinaria’ en las urnas electrónicas utilizadas en la segunda vuelta de las Elecciones Generales del 2022”, dice un comunicado del organismo.

El documento expresa que los partidos no cumplieron la encomienda de realizar una auditoría a las dos vueltas electorales en el plazo de 24 horas posteriores a la solicitud, según la cual “las máquinas de votación electrónica de modelos anteriores a 2020 no podrían ser identificadas, lo que caracterizaría un supuesto mal funcionamiento del equipo”.

La notificación también presentó la documentación técnica que demuestra que las máquinas de votación electrónica “de todos los modelos, son capaces de identificar a las personas de forma completa, segura y clara, una a una”.

Los colegas de Aos Fatos explicaron, en una verificación, que la solicitud que presentó la coalición tenía reclamos falsos, como afirmar que las urnas de votación electrónica generan una tarjeta con un número de registro diferente al de máquina y que, por ello, no había forma de asociarlas. Esto no es cierto, pues existen otros números que permiten hacerlo.

También argumentaba que la identificación de los nombres de los electores en los registros violaba el secreto del voto, pero Aos Fatos determinó que esto era falso, pues el nombre, por sí solo, no daba información sobre la elección del votante.

Por estos elementos, calificamos como falsas las publicaciones que afirman que una solicitud de auditoría, hecha por el partido de Jair Bolsonaro, confirma un supuesto fraude, anula las elecciones y lo declara ganador de la reelección.