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Cuestionable
“Le han dicho que gobernamos mal, que podríamos paralizar el país. Pero miren lo que pasó cuando gobernamos a Bogotá. Logramos la tasa de ocupación laboral más alta de la historia de la ciudad. Después de nuestro gobierno se desplomó. Esto se llama crear riqueza”. Estas palabras fueron trinadas por el senador Gustavo Petro en la tarde del pasado 28 de febrero de 2021.
El trino está ilustrado con una gráfica de las tasas de ocupación de Bogotá de 2001 a 2020, basada en datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE, en la cual se resaltan los años 2012, 2013, 2014 y 2015 con el logotipo de Bogotá Humana.
Le han dicho que gobernamos mal, que podríamos paralizar el país.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) February 28, 2021
Pero miren lo que pasó cuando gobernamos a Bogotá.
Logramos la tasa de ocupación laboral más alta de la historia de la ciudad. Después de nuestro gobierno se desplomó.
Esto se llama crear riqueza.
Fuente DANE pic.twitter.com/Pg9990HOQr
Esta publicación, en la que el senador y posible candidato presidencial adjudica a su administración como alcalde de Bogotá las cifras de ocupación de dichos años, ha sido retuiteada más de 3.200 veces y ha recibido más de 8.600 me gusta. Esa es una de las razones por las que en Colombiacheck decidimos revisarla.
Además, encontramos que un par de portales de noticias han publicado artículos que van por la misma línea argumentativa que el trino del líder de Colombia Humana y que circulan ampliamente en redes sociales.
Por ejemplo, Pluralidad Z, el 9 de febrero publicó un artículo titulado “Según el DANE, Gustavo Petro generó empleo y riqueza durante su alcaldía en Bogotá”. En este se sostiene, igual que en el trino, que las “mínimas tasas [de desempleo] se dieron justamente cuando Petro estuvo al mando de la rama ejecutiva de la principal ciudad del país” y que “ninguna de las administraciones posteriores ha alcanzado números tan positivos como los obtuvo Petro durante el 2014”.
El link de la publicación, según datos de CrowdTangle, una herramienta de monitoreo de redes sociales, ha tenido más de 96.300 interacciones en Facebook y Twitter. Además, ha sido compartida tanto en febrero como a finales de marzo.
El mismo contenido aparece publicado por el portal Noticias Colombia, en el cual ha tenido más de 2.700 interacciones en Facebook, de acuerdo con CrowdTangle.
En Colombiacheck calificamos como cuestionables tanto el trino de Gustavo Petro como los artículos con contenido similar a su publicación.
Aunque las cifras de ocupación (más allá de la calidad del empleo) en la ciudad son acertadas, no es posible adjudicar dichos resultados enteramente a su administración, sin tener en cuenta otros factores como que el crecimiento de la ocupación del país era similar. De acuerdo con varios expertos a los que consultamos, este tipo de fenómenos tienen explicaciones multicausales.
Para verificar el trino del senador, primero revisamos las cifras de ocupación del DANE, y efectivamente los datos presentados son correctos. La cifras de ocupación de la capital entre 2012 y 2015 son significativamente altas, especialmente en 2014, que fue de 66,18 %. Además, la tasa empezó a descender en 2016.
Hay que recordar que Petro fue alcalde entre el primero de enero de 2012 y el 31 de diciembre de 2015, aunque hubo alcaldes encargados entre el 20 de marzo de 2014 y el 23 de abril de 2014. Pero, a simple vista, las cifras le dan la razón al senador.
Sin embargo, como le explicó a Colombiacheck la economista María Fernanda Valdés, doctora en economía por la Freie Universität de Berlín, “el senador Petro está hablando de un resultado de política como si fuera propio, como si Bogotá Humana hubiera logrado esa tasa de ocupación. Pero mostrar solamente una tasa de ocupación, no es suficiente para probarlo. Se necesita un análisis mucho más exhaustivo para saber qué produjo ese resultado”.
En palabras de Iván Jaramillo Jassir, experto en derecho laboral y pensional e investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, “el crecimiento del empleo se asocia a muchos factores: estacionales, PIB e inactividad (...). Vincular las políticas locales con el crecimiento de la empleabilidad es muy complejo porque depende de muchos factores impositivos y de la dirección de la economía nacional. Obviamente sí hay una mejoría a la que él puede contribuir, pero está relacionada con el ciclo económico”.
Es que el incremento de la ocupación que presenta Petro no es aislada. De acuerdo con datos del DANE, la tendencia de la capital fue la misma que la que se presentó a nivel nacional. Además, esta curva de crecimiento no se inició en la administración Petro, sino que empezó antes y alcanzó su cúspide en el ciclo económico.
“Desde 2012, hay un notable crecimiento en la tasa de ocupación nacional, que alcanzó su máximo en 2015. O sea, el evento fue a nivel nacional. Y ese cambio venía creciendo desde 2008, más o menos. No parece ser algo particular de la alcaldía”, explica Laura Fuerte, jefe del departamento de Economía de la Escuela de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de la Sabana.
¿A qué se podría deber ese incremento de la ocupación en todo el país? Para explicar este tipo de fenómenos, según Valdés, “hay una parte que puede ser política y otra parte que es buena suerte. Y la buena suerte puede ser ciclo económico”.
En sus palabras, “en el 2014 empiezan a caer los precios de los commodities y todo Colombia se siente eso, pero en el 2011, 2012, 2013 fue una época de muy buen crecimiento económico en Colombia. Fue una época en la todavía estaban los precios del petróleo altísimos. Entonces nosotros nos beneficiamos mucho de eso hasta el 2014. Ya después cae”.
El precio del petróleo fijado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) es solo una muestra de ese ciclo económico favorable. En 2012 alcanzó el precio más alto desde 1960: 109,45 dólares por barril. Y en 2015 y 2016 cayó a menos de la mitad de la cifra de 2012: 49, 49 y 40,76 dólares por barril respectivamente.
Evolución anual del precio medio del petróleo crudo fijado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de 1960 a 2020 (en dólares por barril). Fuente: Statista.
La bonanza de la economía colombiana y latinoamericana durante esta época en relación con el aumento del precio de los commodities ha sido analizada en diversos artículos (1, 2, 3, 4 y 5).
Por ejemplo, en una investigación publicada en 2019 por la Universidad de La Salle en la que se analizaron los precios de los commodities y las causas y efectos del crecimiento económico en Colombia entre 1986 y 2016, se concluyó que para Colombia hay una “relación positiva entre el crecimiento económico y los precios de los commodities, siendo el petróleo el más relevante”.
Así mismo, en un trabajo publicado en 2017 por la Universidad de Chile, se escribió que un ejemplo de los efectos de los shocks externos sobre la economía latinoamericana es “el superciclo en los precios de commodities desencadenado el 2003, el cual estuvo impulsado principalmente por el aumento en la demanda de China por materias primas”, que “junto a otros hechos evidenciados durante la primera década del siglo XXI contribuyó al progreso económico de Latinoamérica”.
Uno de los efectos que se enumeran para el caso de Chile era el impacto positivo en el mercado laboral.
Por su parte, en un artículo publicado en 2015 en los Borradores de Economía del Banco de la República se anotaron algunos de los factores que “le permitieron al país incrementar su ritmo de crecimiento a partir de 2004, y lograr una rápida recuperación de los efectos de la crisis financiera internacional en 2009”, además de “ubicar a Colombia como una de las economías más dinámicas de América Latina”.
Entre estos se cuentan: los altos precios del petróleo (que coincidieron con una significativa expansión de sus niveles de producción en el país) y de otras materias primas, “mayores flujos de capital, las favorables condiciones de financiamiento externo (bajas tasas de interés, primas de riesgo reducidas y abundante liquidez internacional) y la mayor confianza de consumidores e inversionistas”.
Además, se cita, tal como nos indicó Valdés, que “a partir de la segunda mitad de 2014 la economía colombiana comenzó a ser afectada por una significativa reducción de sus términos de intercambio como resultado principalmente de la fuerte caída del precio del petróleo” y otros choques externos como la desaceleración económica de China y otros socios comerciales, que afectaron el crecimiento económico del país.
Además de esto, al comparar la variación porcentual del crecimiento de la ocupación entre Bogotá y el total nacional se evidencia que en 2012 y 2013 la variación de la capital se dió casi que en el mismo nivel que la de la nación, y que en 2014 y 2015 el crecimiento fue inferior al de todo el país.
El crecimiento más notorio por encima de la variación nacional se presentó entre 2010 y 2011.
Además de consultar a los expertos, nos comunicamos a través de Twitter con el senador Petro y le preguntamos a qué decisiones y políticas de su administración le atribuye propiamente el incremento de la tasa de ocupación de la ciudad en esa época, los programas exactos y la ocupación generada, y si es posible que otros factores, como los que hemos descrito en esta verificación, influyeran en la tasa de ocupación durante su mandato.
Nos respondió:
“La tasas de ocupación depende de la ampliación del mercado interno. El mercado interno creció en Bogotá gracias a la disminución sustancial de la pobreza. ¿Qué políticas implementamos para la reducción de la pobreza? El consumo mínimo vital gratuito, el subsidio sisbén en el transporte, la expansión del cuidado integral de la primera infancia, los Territorios Saludables entre otras medidas”.
Con base en esta respuesta, Laura Fuerte le dijo a Colombiacheck que aunque tiene sentido que se pueda incrementar la ocupación a través de la demanda (la gente tiene más recursos por las medidas implementadas para la reducción de la pobreza), “lo que parecería un poco extraño es que el senador Petro está defendiendo que si el aumento en la tasa de ocupación fue porque las medidas que se tomaron en reducción de pobreza, pues la creación de demanda agregada y de los empleos no tienen efectos inmediatos”.
“Las medidas toman tiempo y más si es por el lado de la demanda porque el mecanismo de transmisión es mucho más lento. Primero hay que esperar a que se genere una mayor presión sobre la oferta para que la oferta demande ese mayor mercado laboral”, agregó la economista.
En ese sentido, la respuesta del senador Petro no explicaría la tasa de ocupación de, por ejemplo, 2012, año en que se inició su mandato. Además, las políticas que mencionó como explicación de la tasa de ocupación se implementaron, por supuesto, a lo largo de su gobierno:
1) El decreto de consumo mínimo vital gratuito de agua potable se firmó el 15 de febrero de 2012.
2) El subsidio de transporte para población sisbenizada empezó a ser efectivo en 2014.
3) Y el programa Territorios Saludables se inauguró a mediados de 2013.
Por su parte, María Fernanda Valdés, nos explicó que “los factores que el senador Petro presenta son muy importantes, porque obviamente aumentando el consumo, sobre todo de las clases pobres se amplía el consumo interno de una ciudad. Y esto podría ocasionar un aumento de la ocupación, Pero lo que le está diciendo es solamente una hipótesis, él no lo está probando”.
“En economía, para probar algo como esto uno tendría que hacer un análisis muy detallado donde uno pudiera ver cuál de todos estos factores fue el que más afectó y si todos estos factores afectaron”, agregó la economista.
Así las cosas, le preguntamos al senador si existen estudios que permitan establecer una relación causal entre las políticas de su alcaldía y las tasas de ocupación. “Los únicos estudios los hizo Jorge Iván González, que yo conozca”, nos respondió.
Nos comunicamos con el referido del senador, doctor en economía de la Universidad Católica de Lovaina y profesor de la facultad de Economía de la Universidad Externado de Colombia, quien nos compartió un análisis de las cifras que dejó en Bogotá la alcaldía de Petro, publicado el 07 de abril de 2014. Hay que aclarar que no se trata de un estudio de causalidad.
En el texto se explica, por ejemplo, que “la tendencia creciente del PIB [de la ciudad] se mantuvo durante los dos años [hasta ese momento] de la alcaldía de Petro” y que “las variaciones anuales de ese indicador son [eran] similares a las que ha [había] tenido el PIB nacional, y son [eran] propias del ciclo”.
También que aunque las 13 áreas metropolitanas de Colombia mostraban un aumento de la ocupación, en Bogotá en 2013 había menor desempleo y mayor ocupación que en las demás áreas.
“La interpretación de estas tendencias es especialmente favorable si se tiene en cuenta la elevada tasa de participación que existe en Bogotá (71,4 por ciento) con respecto a las áreas metropolitanas (67,4 por ciento). Bogotá tiene un mérito especial porque cuando la tasa de participación es alta, es más difícil reducir la tasa de desempleo”, anotó el experto en el texto.
Cuando le preguntamos si era posible establecer una relación directa entre las políticas adoptadas por la administración de Petro y la tasas de ocupación de la ciudad, tal como el senador hizo en su trino, respondió: “A otras ciudades, en el mismo momento, no les fue tan bien. Este podría ser un criterio para evaluar. Por esos días Bogotá y Bucaramanga tenía muy buenos indicadores. Otras ciudades no estuvieron tan bien, a pesar de que gozaron de las mismas bonanzas”.