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Viernes, 10 Enero 2025

Carta abierta a Mark Zuckerberg de los fact-checkers del mundo, nueve años después

Por International Fact-Checking Network - IFCN

Meta anunció el fin del fact-checking en EE.UU., socios del programa advierten sobre un retroceso en la precisión en línea y posibles consecuencias globales.

Estimado Sr. Zuckerberg:

Hace nueve años, le escribimos sobre los daños reales causados por la desinformación en Facebook. En respuesta, Meta creó un programa de fact-checking que ayudó a proteger a millones de usuarios de engaños y teorías conspirativas. Esta semana, usted anunció el fin de ese programa en Estados Unidos por preocupaciones sobre “demasiada censura”, una decisión que amenaza con deshacer casi una década de avances en la promoción de información precisa en internet.

El programa lanzado en 2016 fue un gran paso adelante fomentando la veracidad de los hechos en línea. Ayudó a los usuarios de Facebook, Instagram y Threads a tener una experiencia más positiva al reducir la difusión de información falsa o engañosa. Creemos —y los datos lo demuestran— que la mayoría de las personas en redes sociales busca información confiable para tomar decisiones sobre sus vidas y tener buenas interacciones con amigos y familiares. El objetivo siempre fue informar a los usuarios sobre la información falsa para frenar su propagación, sin censurar. Los fact-checkers defendemos firmemente la libertad de expresión, como afirmamos en la Declaración de Sarajevo el año pasado. Explicar por qué algo no es cierto también es parte de la libertad de expresión.

Sin embargo, usted afirma que el programa se ha convertido en “una herramienta para censurar” y que “los fact-checkers han sido demasiado tendenciosos políticamente y han destruido más confianza de la que han generado, especialmente en EE.UU.” Esto es falso, y queremos aclararlo tanto en el contexto actual como para el registro histórico.

Meta exigió a todos sus socios de fact-checking cumplir estrictas normas de imparcialidad, verificadas por International Fact-Checking Network (IFCN). Esto implicaba no tener vínculos con partidos políticos o candidatos, no promover políticas públicas y mantener un compromiso firme con la objetividad y la transparencia. Cada organización pasa anualmente por una rigurosa verificación, que incluye evaluaciones independientes y revisión por pares. Meta siempre elogió estos estándares por su rigor y eficacia. De hecho, hace solo un año, Meta extendió el programa a Threads.

Sus comentarios sugieren que los fact-checkers eran responsables de la censura, aunque Meta nunca nos otorgó la capacidad ni la autoridad para eliminar contenido o cuentas. Los usuarios han culpado y acosado a los fact-checkers por acciones que fueron decisiones internas de Meta. Sus recientes declaraciones probablemente alimentarán esas percepciones. La realidad es que fue el personal de Meta quien decidió cómo degradar o etiquetar contenido verificado como falso. Varios fact-checkers propusimos mejoras para que estas etiquetas fueran menos intrusivas y evitaran la apariencia de censura, pero Meta nunca implementó esos cambios. Además, Meta eximió a políticos y candidatos del fact-checking, incluso cuando difundían información falsa. Los fact-checkers, por el contrario, sostuvimos que todos los políticos debían ser verificados.

Meta compartió información limitada sobre los resultados del programa, pese a solicitudes reiteradas de datos por parte de verificadores e investigadores. Sin embargo, los estudios indicaban que las etiquetas de verificación reducían la creencia y difusión de información falsa. Incluso en su testimonio ante el Congreso, usted presumió del “programa de fact-checking líder en la industria” de Meta.

Ahora, planea implementar un programa de Community Notes similar al de X (antes Twitter). No creemos que este tipo de programa mejore la experiencia de usuario, como ya se ha demostrado en X. Los estudios muestran que muchas notas comunitarias nunca se publican porque dependen de un consenso político generalizado, en lugar de estándares y evidencia de precisión. Sin embargo, no hay razón para que Community Notes no pueda coexistir con el programa de fact-checking de terceros. Un modelo colaborativo entre ambos tendría un gran potencial para promover información precisa. Esto es urgente: si la gente percibe que las redes están llenas de estafas y engaños, dejarán de usarlas o hacer negocios allí.

Respecto al contexto político en EE.UU., el momento de su anuncio coincide con la certificación electoral del presidente electo Donald Trump y con la respuesta del sector tecnológico a la nueva administración. El propio Trump dijo que su anuncio fue “probablemente” una reacción a sus amenazas hacia usted. Varios periodistas de nuestra comunidad han enfrentado amenazas similares de sus gobiernos, por lo que entendemos cuán difícil es resistir esa presión.

Por ahora, la decisión de terminar el programa en 2025 solo aplica a EE.UU., pero Meta tiene programas similares en más de 100 países, muchos de los cuales son vulnerables a la desinformación, que puede provocar inestabilidad política, interferencia electoral, violencia y genocidio. Si Meta decide cancelar el programa a nivel global, probablemente se producirán daños reales en muchos lugares.

Este momento destaca la necesidad de más financiamiento para el periodismo de servicio público. El fact-checking es esencial para mantener realidades compartidas y debates basados en evidencia, tanto en EE.UU. como globalmente. El sector filantrópico tiene la oportunidad de aumentar su inversión en periodismo en un momento crítico.

Sobre todo, creemos que poner fin al programa de fact-checking de Meta es un retroceso para quienes deseamos una internet que priorice información precisa y confiable. Esperamos poder recuperar este terreno en los próximos años. Estamos dispuestos a trabajar nuevamente con Meta o cualquier otra plataforma tecnológica interesada en el fact-checking como herramienta para brindar a las personas la información que necesitan.

El acceso a la verdad impulsa la libertad de expresión y permite que las comunidades alineen sus decisiones con sus valores. Como periodistas, seguimos comprometidos con la libertad de prensa, asegurando que la búsqueda de la verdad siga siendo un pilar de la democracia.

Atentamente,

Por Colombia, Colombiacheck y La Silla Vacía.

La lista completa de firmantes se encuentra en la carta original en inglés.

Esta traducción es de Factchequeado, medio verificador en español de los Estados Unidos que también suscribe la comunicación. La foto de Zuckerberg usada en la portada de ambas versiones es de Mark Lennihan para la agencia Associated Press (AP).

También puede leer aquí el comunicado conjunto de la alianza LatamChequea sobre la decisión de Meta.