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Miércoles, 30 Octubre 2024

Astrofísico Corbyn contradice sin pruebas al consenso científico sobre efecto del CO2 en el clima

Por Alexander Campos Sandoval

Sus ideas, difundidas por negacionistas del cambio climático, han sido desacreditadas por ir contra la evidencia sin tener ningún fundamento.

3 DATOS CLAVE:

  1. Circula en redes sociales un video en el que un científico asegura que el cambio climático es una “teoría de la conspiración” porque, supuestamente, el CO2 no influye en la temperatura de la Tierra y que, de hecho, el planeta se está enfriando.
  2. El protagonista del metraje es Piers Corbyn, un astrofísico cuestionado por difundir desinformación sobre el cambio climático y la vacunación contra el covid-19.
  3. El consenso científico global sostiene que el calentamiento global existe y es consecuencia de la actividad humana, principalmente debido al aumento de gases de efecto invernadero como el CO2.

En Facebook e Instagram circula un video en el que un científico asegura que “la teoría del cambio climático es una teoría de la conspiración sobre el cambio climático y es completamente estúpida”, en tanto, supuestamente, “son las temperaturas mundiales las que controlan la concentración de dióxido de carbono. Ese CO2 no tiene ningún efecto”. Además, sentencia que “el clima real se está enfriando”.

En Facebook, el mensaje que acompaña el video en la publicación reza “☀️🌧️El astrofísico Piers Corbyn disipa el cuento de hadas de que el CO2 es el RESPONSABLE DIRECTO DEL CAMBIO CLIMÁTICO, y por el cual se están CREANDO NUEVOS IMPUESTOS para enfrentarlo. Es decir, nos van a meter nuevamente la mano en el bolsillo para que le llenemos las arcas. ‘El hombre no produce el cambio climático. El cambio climático no es producto del CO2. El clima siempre cambia.’- Piers Corbyn”.

Estos contenidos guardan semejanza con los verificados en nuestro reciente artículo “Negacionista del cambio climático desinforma en video al decir que ‘el CO2 es bueno para el mundo’”, donde desmentimos afirmaciones de otra supuesta autoridad científica que negaba los efectos nocivos de los gases de efecto invernadero para la estabilidad climática del planeta.

En Colombiacheck verificamos lo dicho en este nuevo video y lo calificamos como falso. Encontramos que no hay fundamento para afirmar que el dióxido de carbono (CO2) no influye sobre el calor global. Por el contrario, esto contradice el consenso científico acerca del efecto invernadero y su relación con el cambio climático. 

Además, destacamos que el protagonista del video, Piers Corbyn, es un astrofísico que no es un científico del clima y ha sido verificado por varios colegas por crear y difundir desinformación acerca del cambio climático.

Más canales conspiranoicos

Siguiendo la marca de agua superpuesta en el video, encontramos que la fuente del original traducido es el canal de Telegram ‘Marcelo Daniel Otero CDS’, que cuenta con 10.463 suscriptores. Su publicación data del 2 de octubre, acumula 8.884 visualizaciones y contiene el mismo mensaje ya citado, pero con la siguiente frase adicional al inicio: “NO TE DEJES ENGAÑAR CON OTRA ESTAFA MUNDIAL”. 

Allí no incluye el logotipo que aparece en la esquina superior derecha del video en Facebook, correspondiente al grupo ‘Tercera Guerra Mundial’ en la misma red de mensajería instantánea.

Ambos canales difunden contenido sobre teorías de conspiración. En el caso de este último, se abordan supuestos temas de satanismo en élites políticas, programas de despoblamiento mundial y especulación sobre conflictos bélicos.

El CO2 y la temperatura

La evidencia científica ha determinado que existe un fenómeno llamado efecto invernadero, causado por diferentes gases entre los que se cuentan el óxido nitroso, el metano y, por supuesto, el CO2. Estas moléculas tienen la capacidad de absorber la luz solar y calentar la superficie terrestre, por lo cual, con mayores emisiones, mayor calor acumulan dentro de la atmósfera.

La ingeniera química Kelly Johanna Basabe Alvarado, magíster en Gestión Ambiental, nos explicó así el funcionamiento de este sistema:

La temperatura de la Tierra depende del balance de la energía solar que ingresa a la superficie terrestre, su distribución entre la superficie y el océano, y cuánta energía se refleja o sale del sistema. En este ciclo, siempre ingresa más energía de la que se emite. Gases de efecto invernadero (GEI), corrientes de aire, corrientes oceánicas, polos y rotación de la Tierra influyen en el clima. Las emisiones de CO2 provenientes de procesos humanos hacen más espesa la capa de GEI, aumentando la absorción y reingreso de calor en la atmósfera”.

Mientras Corbyn lanza sus afirmaciones sin sustento, el consenso científico habla a través de autoridades como la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, en inglés) y la Agencia de Protección Ambiental, ambas de Estados Unidos, en cuyos programas de monitoreo se tiene como un hecho la relación entre la emisión de GEI y el aumento de la temperatura global. 

Esta fue explicada por el medio especializado en periodismo climático Carbon Brief, que demuestra, con el sustento de diversos estudios, la estrecha sincronía entre los picos de CO2 en la atmósfera y los saltos en la temperatura global.

Cabe anotar que, igual que otras desinformaciones semejantes, las publicaciones incluyen menciones acerca del impuesto al carbono. Esta medida fiscal busca desestimular las emisiones y juntar fondos para atender los estragos generados por el cambio climático, para el cual la acción humana en los países altamente desarrollados es innegable.

El planeta se calienta

El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), organismo de las Naciones Unidas que reúne a más de 330 científicos de 67 países para estudiar la evolución de este fenómeno, emitió recientemente el AR6 Synthesis Report: Climate Change 2023, donde se evidencia que el océano y la superficie de la Tierra han aumentado su temperatura.

Así mismo, datos del Gravity Recovery and Climate Experiment de la NASA demuestran la disminución en la masa de las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida.  Entre 1993 y 2019, esta última perdió en promedio 279.000 millones de toneladas anuales de hielo, mientras que el continente del Polo Sur perdió alrededor de 148.000 millones.

Estas estimaciones coinciden con la tendencia hallada por el National Snow and Ice Data Center (NSIDC), iniciativa de la Universidad de Colorado en Boulder, Estados Unidos, que concluye que la capa de nieve en estos polos se está derritiendo.

Entretanto, como encontró la NASA, el nivel medio global del mar creció aproximadamente 4 pulgadas (9,4 centímetros) desde 1993. El ritmo de este aumento se aceleró a más del doble, desde 0,07 pulgadas (0,18 centímetros) por año en 1993 a la actual tasa de 0,17 pulgadas (0,42 centímetros) anuales.

Esta información, contrastada y proveniente de la investigación y el consenso científico, fue menospreciada pero no rebatida por Corbyn, quien por su parte no presenta los supuestos datos que respaldan sus afirmaciones.

Basabe, quien nos orientó en el estudio de estos informes, explicó que, aún si los fenómenos climáticos parecieran mostrar condiciones de precipitación y heladas, no controvierten la evidencia sobre el calentamiento global y, por el contrario, la corroboran.

El aumento de las temperaturas afecta las corrientes de aire a gran escala, como el vórtice polar, una masa de aire frío que normalmente se mantiene alrededor de los polos. Como el aire caliente llega a estas zonas en las épocas de invierno, el aire frío puede desplazarse hacia latitudes más bajas, causando inviernos más severos en ciertas regiones y aumentando la cantidad de nevadas y lluvias. Es importante entender que el calentamiento global no solo implica temperaturas más cálidas, si no cómo este proceso afecta el desarrollo de los fenómenos climáticos, su frecuencia e intensidad”. 

El teórico de la conspiración

Piers Corbyn es un meteorólogo británico reconocido por sus posturas escépticas respecto al cambio climático y su afinidad por las teorías de conspiración. Nacido el 10 de marzo de 1947, se formó en ciencias físicas en el Imperial College London y obtuvo un posgrado en astrofísica en el Queen Mary College, también de Londres.

Sin embargo, su carrera ha estado marcada más por sus controversias que por su contribución científica, particularmente en el ámbito del cambio climático y la pandemia de covid-19.

Corbyn no es climatólogo y ha contribuido poco a la literatura científica revisada por pares. Desde finales de los años 90, aparece frecuentemente en eventos que desafían el consenso científico sobre el calentamiento global, alegando repetidamente que el cambio climático no es de origen humano. 

En cuanto a sus posibles intereses, es dueño de la empresa de predicción meteorológica WeatherAction, que se basa en la actividad solar para hacer pronósticos, reclamando que el Sol es el principal motor del cambio climático.

Sus afirmaciones han sido desmentidas en numerosas ocasiones por diferentes medios. Efe Verifica y AFP, por ejemplo, refutaron que el cambio climático sea un fenómeno natural causado por la actividad solar y lunar, y no provocado por las emisiones humanas. Así mismo, se le ha verificado por sostener la misma teoría que calificamos como falsa al físico William Happer, acerca de que una mayor concentración de CO2 en la atmósfera sería positiva para el planeta.

En ambos casos, las afirmaciones de Corbyn surgieron sin presentar sustento alguno, ni remitir a algún documento o estudio.

Además, este científico desinformó acerca de las vacunas contra el covid-19, estableciendo una correlación equívoca entre la inmunización y un supuesto aumento significativo de muertes. Estas afirmaciones fueron descartadas con datos oficiales de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios del Reino Unido (MHRA), quienes señalan que tales fallecimientos no están relacionados causalmente con las vacunas.

Así pues, es importante considerar que el protagonista del video no es una voz experta o autoridad académica para hablar de la evidencia frente al cambio climático. Se trata de un cuestionado desinformador con intereses económicos dentro de su relato.

Así pues, calificamos como falsas las publicaciones negacionistas del cambio climático que usan como fuente a un consabido desinformador y teórico de la conspiración, cuyas afirmaciones sin sustento han sido desmentidas en numerosas ocasiones. La evidencia y el consenso científico señalan que la Tierra se calienta y que dicho fenómeno responde a la correlación de la temperatura global y la concentración de CO2 en la atmósfera. Esta última ha incrementado notablemente por la acción humana.