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Lunes, 19 Diciembre 2022

Comparación entre economías de Colombia, con Petro, y El Salvador, con Bukele, es cuestionable

Por Jhoandry Suárez

En una imagen se dice que el país centroamericano sí crece gracias al presidente Bukele a diferencia de Colombia con Petro; sin embargo, el PIB nacional hasta octubre seguía expandiéndose, aunque se espera una desaceleración en 2023.

En Facebook circula una imagen (1, 2, 3, 4, 5, 6) en la que se hace una comparación entre los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y de El Salvador, Nayib Bukele. Entre los puntos que menciona la publicación, asegura que con Bukele “la economía de su país crece”, mientras que con Petro “la economía (está) en picada, decrece”. 

El post ha alcanzado casi 500 compartidos, de acuerdo con una  plataforma de Meta a la que tenemos acceso gracias al programa 3PFC, una alianza contra la desinformación. Entre las cuentas que comparten la publicación detectamos dos que tienen gran cantidad de audiencia y se muestran críticas al Gobierno nacional, como son "JE Antipetrista", cuyo ávatar dice "amo mi país... me averguenza Petro", y tiene más de 5.000 amigos y 1.856 seguidores, y "Capitán Antimamerto", cuya descripción es "superhéroe, el socialismo es miseria", con más de 5.000 seguidores. 

En la publicación se compara a Nayib Bukele con Gustavo Petro con varias afirmaciones como ‘Ciudadano demócrata” (en el caso del presidente salvadoreño) y “comunista, guerrillero” (en el caso del colombiano). Sin embargo, la mayoría de las afirmaciones son opiniones y no son verificables. La comparación que sí está basada en datos es la relacionada con la economía, por lo que es objeto de este chequeo.

Es que debido a la viralidad de los post, en Colombiacheck verificamos la afirmación que hace la imagen de carácter económico.  Tras revisar los datos disponibles calificamos la aseveración como cuestionable, ya que la economía de Colombia ha estado creciendo durante el año, al igual que la de El Salvador, pero esta última menos de lo estimado. 

Sobre este tema anteriormente chequeamos a un tiktoker que exageraba sobre el estancamiento de la economía colombiana. Lo puede leer en la nota: “Usuario de TikTok exagera sobre inflación, estancamiento económico e impuesto a ganancias ocasionales”.  

De acuerdo con cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el Producto Interno Bruto (PIB) nacional, el principal indicador del tamaño y comportamiento de una economía, creció un 7% en el tercer trimestre del año, una tendencia positiva que se ha mantenido desde el año pasado. 

gráfico 1 DANE

Recordemos que el presidente Petro comenzó a ejercer su mandato el 7 de agosto. Por lo tanto, parte de esta expansión económica se enmarca dentro de este periodo. 

“En lo corrido del año 2022, respecto al mismo periodo del año anterior, el Producto Interno Bruto presenta un crecimiento 9,4%”, resalta el DANE, y especifica que entre las actividades que más han contribuido con esta dinámica están el comercio al por mayor y al por menor, las industrias manufactureras y las actividades artísticas, de entretenimiento y recreación.

El Banco de la República en su Informe de Política Monetaria de octubre, también destacó el crecimiento económico del país. “Los indicadores de actividad económica para el tercer trimestre sugieren que el PIB habría mantenido un nivel alto, superior a su potencial, con una variación anual del 6,4 % y superior en 0,6 % al observado en el segundo”, señala. 

Adriana Romero Barreto, economista y directora Estudios y Política Pública del Instituto Anticorrupción, apuntó que en el aumento del PIB están involucrados dos componentes importantes, como son el incremento de la demanda y el consumo, luego de que los colombianos estuvieran encerrados durante la pandemia, restringidos para comprar.

El otro factor es la formación bruta de capital, es decir, la inyección de inversión del sector productivo, motivado por las buenas expectativas de crecimiento pospandemia y el aumento del consumo.

Según las proyecciones de organismos internacionales, la economía colombiana será una de las que más se expanda este año en la región. Por ejemplo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su informe de perspectivas para América de octubre estima que terminará con una expansión de 7 puntos y se ubicará como el mayor crecimiento del PIB en América del Sur. 

gráfico 2 fmi

El Banco Mundial, por su parte, también ubica a Colombia dentro de las economías que más van a crecer durante el 2022 en América Latina y el Caribe con un 7,1%.

gráfico 3 banco mundial

Un panorama similar augura la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en sus estimaciones que ubican a Colombia como la segunda economía con mayor expansión de América del Sur, con 8%, solo superada por Venezuela y su crecimiento de 12%.

gráfico 4 Cepal

Pese a este comportamiento, se espera una desaceleración del PIB nacional para el próximo año, con apenas un crecimiento de alrededor 2%, de acuerdo con los cálculos expuestos por las instituciones mencionadas.

También la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD) proyecta el mismo escenario: 

“Se pronostica que el crecimiento del PIB (de Colombia) se ralentice pronunciadamente, pasando del 8,1% en 2022 al 1,2% en 2023, y que se acelere al 1,7% en 2024. El consumo y la inversión seguirán siendo moderados, ya que los hogares y las empresas se enfrentan a niveles elevados de inflación y tasas de interés, así como a incertidumbre sobre las perspectivas y las políticas económicas”, argumentó. 

El Banco de la República no es tan optimista y en octubre rebajó su proyección para 2023 de un PIB de 1,1% a 0,5%.

Para Barreto, también docente universitaria, esta desaceleración se produce precisamente porque el Banco de la República aumentó las tasas de interés para frenar la inflación, lo que ha generado que la gente deje de consumir y de usar sus tarjetas de créditos para preferir ahorrar. Además, como un elemento internacional, agrega el aumento de los insumos por la guerra en Ucrania lo cual complica la capacidad productiva en el país.

La economía de El Salvador 

En cuanto a El Salvador, las cifras más actualizadas sobre su PIB son las del segundo trimestre del año, cuando el Banco Central de la Reserva (BCR) reportó que la economía creció 2,8%.

Aún no se conocen los datos del tercer trimestre y se espera que se revelen el 22 de diciembre de acuerdo con el calendario del BCR.  

La autoridad monetaria apunta que la expansión del PIB se debe a los esfuerzos del gobierno de Bukele en materia de seguridad, lo que favoreció la inversión y el consumo, el posicionamiento del país como destino turístico y el retorno a la modalidad presencial del trabajo después de la pandemia.

Para la entidad, a final de año El Salvador tendría un crecimiento de 2,8 puntos, dos décimas adicionales a lo proyectado en junio pasado, un total contraste con el repunte de la economía de 10,4% que presentó el año pasado.

Sobre el banco central, no obstante, se debe aclarar que el presidente Bukele aumentó su control el año pasado con el decreto 32 aprobado el 3 de junio por la Asamblea Legislativa del país. Este le permite proponer dos de los siete miembros de la junta directiva, en caso de que el sector privado no los postule al parlamento. También amplió las causales por las que el Ejecutivo puede destituir a los miembros designados. 

La economista salvadoreña Iliana Álvarez aseguró para Colombiacheck que efectivamente, pese a que esta entidad es en teoría autónoma, durante el gobierno de Bukele se ha visto su influencia en el funcionamiento de la institución.  

En 2016, además, la institución monetaria se vio envuelta en un escándalo por haber manipulado cifras del PIB. En ese entonces, el presidente del BCR, Óscar Cabrera, admitió en una entrevista al diario El Faro que el sistema de medición era obsoleto y arrojaba datos del tamaño de la economía que no eran realistas. 

Para el Banco Mundial la economía salvadoreña será la que menos crezca en Centroamérica este año, por detrás de una nación como Nicaragua y sus frecuentes crisis políticas; esto luego de haber rebajado su pronóstico de crecimiento para el país de 4% a 2,4%.

El organismo en abril había alertado que “persisten desafíos para El Salvador, como la necesidad de avanzar en reformas para la sostenibilidad fiscal”.

La Cepal también lo ubica como uno de los países con menor expansión de su PIB en la región, con una estimación de 2,6%, solo por delante de Cuba y Haití. 

gráfico 5

Gabriel Labrador, periodista de El Faro, en comunicación con Colombiacheck, explicó que este año la economía salvadoreña no tiene los “resortes” de producción o exportación suficientes, lo que se traduce en su bajo crecimiento. “No tenemos recursos naturales ni un sector productivo fuerte y nuestra balanza de pagos es deficitaria, lo que quiere decir que exportamos menos de lo que importamos. Además, hay inversiones relacionadas con el Bitcoin que no representan mayor cosa”, indicó.

El Salvador, por otro lado, se convirtió el 7 de septiembre del año pasado en uno de los primeros países, junto con la República Centroafricana, en adoptar el bitcoin como moneda de curso legal, aunque analistas coinciden en que es difícil determinar su impacto en la economía interna debido a la opacidad que rodea la inversión en esta criptomoneda. 

“El efecto más grande que puede haber tenido es aumentar la deuda del país y hoy tenemos un hoyo fiscal, que se sepa, de más de 200 millones de dólares que solicitó el Ejecutivo para implementar esta idea, entre la compra del bitcoin, desarrollo de la aplicación, infraestructura para usarlo. Eso tiene un gran impacto en las finanzas del país”, nos dijo Álvaro Bermúdez-Valle, politólogo y profesor universitario.

Un reportaje de la BBC a propósito del desplome en la cotización del bitcoin, a finales de noviembre, expuso también que el Gobierno está usando fondos públicos y, según cálculos, debido al ‘criptocrash’ las pérdidas fiscales podrían ser de unos 70 millones de dólares, basándose exclusivamente en los mensajes que Bukele ha publicado en su cuenta de Twitter. 

“Esto es un experimento en el cual se ha combinado una alta dosis de improvisación y una alta dosis de opacidad”, le dijo a la cadena británica Ricardo Castaneda, economista senior del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, ICEFI.

Tampoco el bitcoin ha tenido la acogida esperada y una encuesta de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, publicada en octubre, expuso que el 65,5% de la población considera que la adopción del bitcoin ha sido un fracaso y el 77,1% afirmó que el gobierno no debería seguir gastando el dinero público en la criptomoneda.

Por lo tanto, resulta difícil establecer qué tipo de impacto puede tener la inclusión de esta criptomenda en el producto interno bruto de El Salvador, aunque especialistas alertan sobre los riesgos de invertir en ella por su volatilidad. 

La desaceleración en 2023 arropará a América Latina

El “frenazo” que sentirán muchas economías en Latinoamérica en 2023 es una situación global que han advertido diferentes organismos internacionales, entre ellos la Cepal, la cual en su informe anual Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe asegura que se estima que el próximo año “se profundice la desaceleración del crecimiento económico y se alcance una tasa del 1,3%” en la región.

“Luego del dinamismo mostrado en el primer semestre de 2022, la actividad económica de la región se ha desacelerado, reflejando, por una parte, el agotamiento del efecto rebote en la recuperación de 2021 y, por otra, los efectos de las políticas monetarias restrictivas, mayores limitaciones del gasto fiscal, menores niveles de consumo e inversión y el deterioro del contexto externo”, sostiene.

En resumen, calificamos como cuestionable que la economía de Colombia esté en picada o decreciendo, como afirma la imagen que circula, ya que los datos confirman que ha estado creciendo, a pesar de que se avecina un año de desaceleración, mientras que el PIB de El Salvador, aunque se está expandiendo según datos oficiales, se estima que en 2022 quede rezagado con respecto al crecimiento de otros países de la región.