Desde mediados de diciembre circulan en redes supuestos listados filtrados, aparentes vínculos comprobados y muchas teorías nuevas sobre la participación de figuras de alto renombre con el explotador sexual y pedófilo Jeffrey Epstein. En Colombia, esta ebullición se ha centrado en el expresidente Andrés Pastrana, quien en los primeros días de enero estuvo entre las tendencias de Google con búsquedas como “Andrés Pastrana Epstein” y “Lista Epstein Pastrana”.

Esta misma relación se evidencia en la página de monitoreo de redes sociales CrowdTangle, donde las publicaciones con las palabras clave “Pastrana” Y “Epstein” se dispararon durante los primeros días de enero en Facebook e Instagram. Las publicaciones arrojadas por la herramienta aseguran que “se hizo pública una lista de los supuestos invitados y asistentes a las fiestas y reuniones que hacía el empresario estadounidense Jeffrey Epstein”, que es “oficial” y en ella aparece “1 colombiano” o, más directamente, que con las revelaciones “se confirma lo de Pastrana”.

Parte de dichas publicaciones contiene desinformación, como expusimos en “Revista Semana no publicó portada sobre ‘Pastrana en la pedofilia’ por ‘lista Epstein’”. Sin embargo, muchas otras incluyen malinterpretaciones o acusaciones tendenciosas sin fundamento.

Por esta razón, en Colombiacheck indagamos al respecto para explicar uno a uno los puntos de esta trama:

• ¿Qué es el caso Epstein?
• ¿Existe una lista?
• ¿Qué personalidades aparecen vinculadas en la nueva etapa?
• ¿Cuál es la relación de Andrés Pastrana?

El caso, los victimarios y una víctima

El empresario estadounidense Jeffrey Epstein, quien amasó su fortuna a finales del siglo pasado tras incursionar en el sector bancario y financiero, desarrolló un círculo social de élite que incluyó a grandes figuras de la política, la farándula y la economía mundial.

En la década del 2000, él y su expareja sentimental Ghislaine Maxwell comenzaron a enfrentar acusaciones de abuso sexual y tráfico de menores. Así inició una larga serie de investigaciones, sostenida hasta la actualidad, que resultó en su condena en 2008 –cuando logró un acuerdo para pagar solo 13 meses de prisión– y en un proceso que lo llevaría a juicio en 2019, cuando murió en la cárcel en la que estaba recluido.

Los testimonios allegados a este caso han implicado a personalidades de alto perfil en una trama de crímenes sexuales contra menores de edad. Como evidencia la anterior cronología, uno de los testimonios clave dentro de las investigaciones judiciales es el de Virginia Giuffre, una de las víctimas vinculadas al caso que resulta crucial en el más reciente episodio de la trama.

Nuevas revelaciones

Desde el pasado 18 de diciembre, los medios de comunicación (1, 2, 3) hicieron eco del anuncio sobre los documentos que pasarían a ser desclasificados en enero de 2024. El hecho de que estos incluyeran nombres mencionados en la trama Epstein generó el malentendido de que se trataba de un listado de entre 150 y 200 nombres, además de provocar con ello la generalización de que todos estos estaban inculpados de algún crimen.

En realidad, no existía ninguna “lista Epstein” ni se anunció que se darían a conocer los clientes del difunto magnate. Los documentos desclasificados corresponden a un proceso específico, iniciado con una demanda por difamación interpuesta por Giuffre contra Maxwell.

En medio del litigio, la víctima, los testigos y las partes intervinientes mencionaron decenas de nombres, en medio de la recapitulación de hechos denunciados. Sin embargo, no todas las personas involucradas están acusadas de cometer algún delito o, siquiera, de estar relacionadas con quienes orquestaron la trama de tráfico y abusos. De hecho, como reportó Associated Press, la jueza aseguró que gran parte era ya de público conocimiento.

Los documentos revelados se encuentran en línea gracias a la interfaz de Court Listener, un repositorio digital de información judicial pública liderado por Free Law Project, una organización sin ánimo de lucro. Allí se puede consultar la aparición de nombres propios en ellos.

Especulación y desinformación sobre los nombres mencionados

Aunque los documentos incluyen la transcripción de menciones a personalidades internacionales como el cantante Michael Jackson, el mago David Copperfield y el físico Stephen Hawking, ninguna los señala de participar en los actos de tráfico y abuso de Epstein. Varios de los montajes generados en contra de estas y otras figuras han sido desmentidos por medios de verificación. Este es el caso de la presentadora Oprah Winfrey, el comediante Jimmy Kimmel, el actor Tom Hanks y la candidata presidencial de la oposición en Venezuela, María Corina Machado, entre otros.

En cuanto a Michael Jackson, la mención a su nombre en los documentos se remonta apenas a la respuesta de una víctima sobre la pregunta “¿conociste a alguien famoso cuando estabas con Jeffrey?”. Ella contesta “conocí a Michael Jackson” y ubica el encuentro en la casa de Epstein en Palm Beach. No señala tener conocimiento de actividades irregulares o comportamientos inadecuados del cantante.

Uno de los nombres más sonados dentro de la controversia es el del expresidente estadounidense Bill Clinton, de quien hay numerosas menciones en los documentos liberados por haber sido amigo personal del criminal. El señalamiento más comentado es el de una de las partes acusadoras, quien asegura que el multimillonario delincuente le dijo que al exmandatario “le gustan [las mujeres] jóvenes”.

El físico Stephen Hawking fue sujeto de un montaje, según el cual aparecía una revelación en los documentos sobre que “le gustaba ver enanos desnudos”. Aunque esto es falso, el académico sí fue citado en un correo enviado por Epstein a Ghislaine Maxwell en 2015. Tras la demanda interpuesta por Giuffre, solicitaba conseguir a alguien que desmintiera las acusaciones de la víctima y, entre ellas, un supuesto señalamiento de participación del científico en una orgía con menores de edad.

El príncipe Andrés de Inglaterra, por otra parte, figura en los nuevos documentos, acusado de “poner sus manos” sobre los pechos de una víctima. Este señalamiento se suma a los que ha hecho Giuffre, quien incluso lo denunció por violación en un proceso que se resolvió a través de un acuerdo extrajudicial.

La mención de Pastrana

A nivel local, supuestos listados filtrados que han circulado desde principios de enero (1, 2) dicen confirmar la participación del expresidente colombiano Andrés Pastrana en hechos ilícitos. Otros sugieren que ya está probado que este acudió a la isla de Epstein, conocida por ser el centro de operaciones de su red de explotación sexual.
 
Al consultar los documentos desclasificados, encontramos que tales señalamientos no encuentran sustento. Entre las cientos de páginas del caso, encontramos una única mención al apellido del exmandatario colombiano.

Esta mención, de hecho, no proviene de ningún testigo sino de un artículo de 2015, presentado como anexo a una declaración en contra del profesor de Harvard Alan Dershowitz. Se trata de un párrafo que recoge el registro, ya conocido, de Andrés Pastrana en el avión de Jeffrey Epstein, citando una declaración de Larry Visoski, piloto del jet privado del magnate.

“Larry Visoski identificó al ex primer ministro israelí Ehud Barak, el expresidente colombiano Andrés Pastrana Arango y el expresidente estadounidense Bill Clinton como pasajeros regulares que probablemente vieron a Epstein con niñas menores de edad en sus aviones privados”.

Respecto a los registros que lo mencionan en las bitácoras de vuelo del ‘Lolita Express’, Pastrana emitió un escueto comunicado en agosto de 2019, desmarcándose de las actividades ilícitas cometidas por Epstein. Allí, confirmó que conoció al delincuente sexual y viajó en su avión con destino a Cuba, invitado por el dictador Fidel Castro, pero negó conocer la isla privada en donde se perpetraron los crímenes contra menores.

Por último, algunos influenciadores han propuesto una supuesta alusión a Pastrana en los documentos revelados. En 2016, Giuffre mencionó que, a raíz de los servicios sexuales para los que la disponían Epstein y Maxwell, conoció en Nuevo México a “un presidente extranjero”, “hispano”, “alto”, “en sus 40”, “de cabello oscuro” y “con acento de una lengua extranjera”.

Ningún documento confirma en definitiva la identidad de este hombre. La denunciante apenas se disculpa porque “es difícil recordar tantos distintos eventos con tantas distintas personas”.