A partir del 25 de mayo, cinco días después de la suspensión temporal del servicio de gas natural en 6 departamentos, comenzó el restablecimiento a hogares, comercios e industrias.
En el plazo de la contingencia, numerosas publicaciones en redes sociales aventuraron afirmaciones señalando responsabilidades erróneas de la suspensión. Una de ellas fue objeto de nuestra verificación en “Es falso que “se acaba el gas en Colombia” como tuiteó Agustín Laje”. Así mismo, a partir de la información pública que se conoce a día de hoy, identificamos varias narrativas generadas en la coyuntura y explicamos por qué contribuyeron a la desinformación.
Figuras que han sido ya objeto de nuestras verificaciones como los abogados Enrique Gómez y Ani Abello contribuyeron a difundir la idea de que el Gobierno Nacional, su tendencia política o figuras dentro del mismo fueron causantes de la contingencia. Así mismo hicieron otras personalidades y cuentas como Andrés Escobar y el usuario @RepublicaNow:
Como explicamos en nuestro chequeo anterior, la suspensión fue realizada por la empresa privada Transportadora de Gas Internacional (TGI), operadora de un gasoducto cercano a la anomalía de temperatura presentada desde el viernes 19 de mayo en inmediaciones del volcán Cerro Bravo. Según informaron conjuntamente el Ministerio de Minas y TGI, la causa del incremento a más de 600 grados centígrados fue un incendio subterráneo.
Así pues, no puede achacarse a representantes del Gobierno Nacional la contingencia. En materia política, por otra parte, no hay evidencia de disposiciones tomadas desde la llegada del nuevo Gobierno en materia de protocolos en el sector. Así nos lo explicó Giovanni Pabón, director del área Energía de Transforma:
“El gobierno actual no ha sacado hasta el momento ninguna normatividad, ninguna reglamentación y no existe tampoco ningún mandato en el Plan Nacional de Desarrollo para disminuir o, incluso, cortar algún tipo de energético en los servicios públicos del país".
En conclusión, pese a las posturas del Gobierno Nacional en materia energética y las declaraciones de funcionarios como la Ministra Irene Vélez, la suspensión tuvo origen en una anomalía específica y fue decisión de la empresa privada TGI por motivos de seguridad.
Un trino de la senadora Paloma Valencia con 23 mil reproducciones y otro del usuario @SegundoLaVerdad, con más de 10 mil, sugirieron que la reacción del Gobierno ante la contingencia fue tardía:
Dicho ya que la suspensión fue realizada por operarios de TGI a las “00:00 horas del 20 de mayo” tras detectar la anomalía “en la noche del 19 de mayo”, de manera que no hubo entre el suceso y la suspensión un margen importante “para tomar decisiones” como sugirió la senadora. Cabe anotar que la comunicación de la suspensión se publicó en la tarde del mismo sábado 20 de mayo, anotando en el comunicado “TGI ha activado junto con el CNO gas [Consejo Nacional de Operación de gas natural], Ministerio de Minas y Energía y las empresas distribuidoras, la construcción de alternativas para el transporte de gas”.
Comunicado de prensa.
— Transportadora de Gas Internacional (@TGISAESP) May 20, 2023
TGI informa suspensión temporal del transporte de gas natural a la altura de Mariquita, Tolima. pic.twitter.com/K3Lswr6WGX
Esta comunicación fue respaldada por el Ministerio de Minas y Energía a las seis de la mañana del 21 de mayo, asegurando en un comunicado: “Desde el reporte del caso, El Consejo Nacional de Operación de Gas Natural (CNO), liderado por el Ministerio de Energía [...] se vienen adelantando acciones técnicas y operativas urgentes, para tener alternativas de conexiones y transporte gas y mitigar la afectación en la prestación del servicio a los usuarios”:
#ComunicadoDePrensa || De acuerdo con la situación que se presenta en Cerro Bravo, municipio de Herveo Tolima, a causa de una anomalía térmica asociada al subsuelo, que pudiese afectar el tubo que transporta el gas hacia en el suroccidente del país, el @MinEnergiaCo informa: pic.twitter.com/YiLJ33pwbL
— Minenergía (@MinEnergiaCo) May 21, 2023
Encontramos que ambas actualizaciones se realizaron antes de los trinos de la senadora Valencia y el usuario @SegundoLaVerdad, por lo cual no tendría asidero para entonces afirmar que hubo inacción desde el Gobierno. Además, en la mañana del 22 de mayo, dos días después de la suspensión, el Ministerio emitió un nuevo comunicado informando las decisiones tomadas hasta ese punto:
#ComunicadoDePrensa || En reunión del CNO Gas se definió plan de acción con los agentes y distribuidores del sector del gas natural, con el fin de mitigar el impacto de la emergencia que afecta suministro en el eje cafetero y sur occidente del país. Ver comunicado 👇 pic.twitter.com/I3453Srcog
— Minenergía (@MinEnergiaCo) May 22, 2023
El abogado Alejandro Bermeo, sujeto de verificaciones en el pasado, aseguró el 22 de mayo que con la suspensión del servicio estaría “Todo el teatro armado para importar gas Venezolano. Ese es el gran negocio del Petrismo. De ahí saldrán millonarios todos”. El trino tiene a día de hoy 5804 reproducciones y 200 likes.
La afirmación recuerda una entrevista de la Ministra Irene Vélez con Blu Radio en agosto de 2022 en que la funcionaria afirmó “Tenemos reservas de gas de siete a ocho años. Si necesitáramos llenar nuestra matriz energética se podría hacer la conexión de transporte de gas con Venezuela”. Sin embargo, estas mismas declaraciones señalan el error de Bermeo, puesto que la Ministra condicionó la eventual conexión a que “nuestras reservas no fueran suficientes para nuestro autoabastecimiento”.
Como explicamos antes, ningún actor señaló que la contingencia fuese provocada por problemas de abastecimiento, sino por las medidas necesarias de prevención tomadas frente a la anomalía en la temperatura. Evidencia del fundamento de esta versión es que el servicio no se suspendió en todo el país, sino en los departamentos subsiguientes a partir del gasoducto afectado.
Finalmente, cabe anotar que la solución propuesta en principio para remediar la falta de suministro no tuvo que ver con adquirir gas de otra fuente, sino con la construcción de una tubería flexible que, para el martes 23 de mayo, preveía cerca de nueve días de tardanza para el restablecimiento del servicio. Sin embargo, en la mañana del 25 de mayo, la presidenta de TGI informó que el tubo principal se encontraba en buenas condiciones, lo que permitió retomar el flujo antes de lo previsto.
La narrativa más extendida durante los días de la suspensión fue la misma que ayudó a difundir Agustín Laje: se agotan las reservas de gas en Colombia. Así se difundió a través de cuentas en Facebook, TikTok y cuentas de Twitter (1, 2, 3) cuyas publicaciones suman a día de hoy más de 363 mil reproducciones.
Un factor común de esta desinformación es un clip de Noticias Caracol emitido en la noche del 21 de mayo. En él, la periodista Sindy Rodríguez asegura: “Efigas, que es la empresa que surte al Eje Cafetero, acaba de anunciar que sus reservas también se agotaron y es inminente la restricción en los departamentos de Caldas, Quindío y Risaralda”. Además, en su reportaje asegura que “con las reservas de gas prácticamente agotadas la empresa Gases de Occidente anunció el inicio de la suspensión del servicio de gas [...]”.
Aunque ambas empresas anunciaron, efectivamente, la restricción del servicio de gas a raíz de no contar con más flujo, ni el comunicado de Gases de Occidente ni el de Efigas mencionan la palabra “reservas”, que en el lenguaje técnico de los hidrocarburos refiere los yacimientos en los que se encuentra el recurso.
Mientras el anuncio de suspensión de Efigas explicaba que “se consumió casi en su totalidad el gas que se encontraba almacenado en los sistemas de transporte y distribución”, previamente (el 20 de mayo) Gases de Occidente había previsto la restricción con base en la “disminución en el nivel de presiones del Sistema Nacional de Transportes [SNT]”.
Es decir, que hasta la noche del 21 de mayo ambas empresas trabajaron con remanentes alojados en los gasoductos tras la suspensión del sábado 20 de mayo en Tolima. De hecho, la recomendación del subdirector de Efigas dicho sábado fue hacer uso eficiente del gas que aún fluía:
Nuestro Subgerente Técnico Jorge Enrique González, nos entrega un balance de lo que ha sido el día de hoy frente al evento presentado con el servicio a raíz de lo ocurrido en Cerro Bravo.
— Efigas Oficial (@efigas_oficial) May 21, 2023
*Abrimos hilo 🧵 pic.twitter.com/VazRC0Aamc
Con este contexto, anotamos la última narrativa de desinformación asociada: un escenario energético como el de Venezuela, donde el desabastecimiento de gas ha llevado a un uso creciente de cocinas de leña en los últimos años. En la herramienta de monitoreo de redes sociales Crowdtangle pudimos comprobar cómo crecieron desde el 19 de mayo las interacciones en publicaciones locales que incluyen los términos “Venezuela” y “gas”.
Afirmaciones en este sentido fueron publicadas por el representante a la Cámara Miguel Polo Polo (333 mil reproducciones) y el usuario de TikTok Harry Valencia Molina (157 mil reproducciones).
El informe publicado por la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) el pasado 24 de mayo demuestra que en Colombia las reservas no se agotaron y que el país no se encuentra en un estado de desabastecimiento que amenace a la población con un escenario como el venezolano.
Sin embargo, la proyección tampoco respalda las visiones favorables sobre el futuro del recurso que aseguró el Gobierno en diciembre pasado, cuando afirmó que existen reservas para garantizar el flujo de gas hasta 2037. De hecho, la cifra concreta una tendencia decreciente de las reservas probadas de gas natural en el país desde 2010, como evidencian análisis de Crudo Transparente y la misma ANH.
El resultado del informe arrojó reservas probadas para 7.5 años; dato que para el profesor Camilo Prieto y el ingeniero Giovanni Pabón contraviene la idea del Gobierno Nacional de no firmar nuevos contratos de exploración:
“Hoy con estas cifras está claro que es imposible hacer ese paro en la exploración hasta no comprobar los nuevos hallazgos. Colombia tiene que seguir explorando porque lo único seguro son sus reservas probadas. Es decir, si paramos de explorar, y no se comprueba nada nuevo de aquí al 2030 el país se quedaría sin petróleo y sin gas. Es importante seguir aumentando las reservas probadas, lo que nos permita una transición económica y energética programada”.