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Falso
Una publicación en Facebook alerta sobre supuestas medidas para adoptar el próximo 14 de febrero, fecha para la que figuras de la oposición como Miguel Polo Polo y Alicia Franco convocaron una manifestación en contra del gobierno de Gustavo Petro; recientemente, sin embargo, se modificó la fecha al 15 de febrero.
El listado de medidas es alarmista e invita, por ejemplo, a “mantener el tanque de gasolina por encima del 50%” y “tener reserva de alimentos (...)”, entre otros. Esta misma cadena ha circulado por WhatsApp y Twitter, pero en el caso de la mentada publicación, el autor incluyó una fotografía de Elvia Cortés, víctima de secuestro y asesinada en el año 2000 a causa de un collar bomba. En la imagen, se responsabiliza del crimen a la hoy extinta guerrilla de las FARC.
Esta atribución de responsabilidad es falsa y ha circulado en numerosas oportunidades desde 2016, durante la campaña del plebiscito sobre la primera versión del Acuerdo Final de Paz entre ese grupo armado y el Estado. En ese entonces, publicamos “Lo del collar bomba, otra explosiva mentira”.
La desinformación resurgió en 2018, poco después de la posesión del presidente Iván Duque y, dos veces en el año 2022. Primero, en el mes de enero, previo a las elecciones legislativas y las consultas presidenciales. Después, en junio, tras la publicación del informe final de la Comisión de la Verdad. Se trata, pues, de un tema recurrente que suele aparecer en tiempos de coyuntura política.
En nuestra primera verificación, realizada en video junto al portal Rutas del Conflicto, expusimos que, si bien la Fuerza Pública señaló en un primer momento a las FARC, posteriormente esa hipótesis quedó descartada tras la investigación judicial. Un individuo llamado José Miguel Suárez, de quien no se encontró ninguna relación con grupos subversivos, fue hallado culpable por el hecho. En 2002, fue condenado a 32 años de prisión.
Por lo anterior, calificamos una vez más como falsa la información que atribuye a las extintas FARC la autoría de este crimen, que en realidad fue obra de delincuencia común.