Córdoba fue senadora liberal durante 16 años (1994-2010) hasta que fue destituida por la Procuraduría, acusada de colaborar con las Farc. La sanción fue anulada por el Consejo de Estado en 2016, pues consideró que no había pruebas de tales nexos, pues las utilizadas por el ente de control disciplinario (en particular los supuestos correos encontrados en el computador del abatido jefe guerrillero 'Raúl Reyes') carecían de validez por violación de la cadena de custodia.

También ha sido reconocida como activista, líder del movimiento social Marcha Patriótica, defensora de los derechos humanos y las minorías, así como mediadora entre el Gobierno y la guerrilla en la liberación de secuestrados. Con esas banderas aspiró a la Presidencia en 2018 pero se retiró antes de la primera vuelta.

Antes de llegar al Senado había sido concejala de Medellín, diputada de Antioquia y representante a la Cámara por ese departamento de 1992 a 1994, siempre en el liberalismo.